Cuando ya has sacado tus primeros temas a la luz, has empezado a crecer como artista y adquieres una formación mínima es fácil llegar a un punto en que adquieres una “velocidad crucero” de producción, esta puede ser de 1 tema cada 3 meses, cada mes o cada semana o lo que sea.
Hasta aquí todo bien, eso significa que has aprendido a ponerte unas metas y has conseguido tener un hábito que te permite lanzar música al mundo cada cierto tiempo, eso es bueno.
Lo no tan bueno, es cuando esa “velocidad crucero” se convierte en un sinónimo de monotonía sonora, es decir, de falta de originalidad y de contenido fresco en tus producciones.
No entraré si esa monotonía te favorece o te lapida como artista, cada caso es diferente.
Si quieres aportar algo nuevo a la escena, o al menos, si no quieres ser llamado como el Vinai de tu pueblo, vamos a probar algunos experimentos que podemos hacer en nuestro estudio para sacar la creatividad que llevamos dentro.
1. Estructura tu canción primero
Es esto hablo más a fondo en la Guía/Ebook que lanzaré en las próximas semanas.
Tiene que ver con el arrangement y el gran flujo de trabajo que nos puede brindar el estructurar nuestro tema nada más empezar el proyecto.
- Separa por grupos de colores los diferentes instrumentos clave (Percusiones, lead, chords y bajo)
- Crea una estructura básica con las Percusiones, te permitirá tener una visión inicial del proyecto un poco más clara
- Identifica las diferentes partes de la estructura (intro, breaks, build-up, drops…) aunque más tarde lo cambies
Este punto es muy importante, ya que desde el primer momento puedes “meter mano” con facilidad a todas las partes del proyecto, evitando bloqueos en el típico loop de 4 u 8 barras y puedas centrarte en la creación.
2. Limítate a 5 instrumentos
Es normal pensar que por tener 400 plugins y otras 400 librerías en nuestro ordenador seremos más creativos, lo cierto es que no suele ser así.
Cuando tenemos tanto material para trabajar tendemos en acabar invirtiendo nuestro tiempo en vagar buscando o procesando del sonido perfecto, haciendo un montón de cambios y acabando concentrándonos en asuntos triviales en vez de hacer música.
De esta forma forzamos el pensamiento lateral, un ejemplo de ello sería la solución que nos obligaríamos a encontrar para hacer más grande una caja sin tener que hacer un layering con otra.
¡Alex dame un ejemplo y corta el rollo! … A mandar:
- Kick
- Hit Hat
- Clap o Snare
- Piano
- Bajo
Si te parece imposible crear un tema con cinco pistas te recomiendo que pruebes con estas herramientas.
- Diseño sonoro trabajado
- MIDI complejo para compensar la falta de instrumentación
- Envíos con efectos
PD: también te recomiendo que aprendas de los productores de minimal de Barcelona, son unos cracks en crear temas funcionales y sin gastar un tercio de su CPU.
3. haz un tema en 1 hora
Casi siempre la causa por la que no acabamos temas es la misma, no podemos una fecha límite, y eso nos lleva a dejar la canción de lado cuando nos bloqueamos con el primer problema o decisión importante a tomar mientras producimos.
la clave de este experimento es, focalizarse en la creación, sabes que tienes 60 minutos y no puedes recrearte con cosas vanales.
Te sorprenderás lo capaz que puedes llegar a ser cuando te concentras únicamente en crear y dejas de lado todos los pequeños detalles.
Una vez acabada esta hora, pondremos una fecha límite para acabar esos detalles y dar por finalizado el proyecto.
4. Trabaja a diferente tempo
Una corriente que se está viendo este 2016 en la música mainstream es reducir bpm’s, en muchas ocasiones el género ni si quiera a distado a lo anteriormente hecho, simplemente lo han hecho más lento.
Véase el caso de Alan Walker por ejemplo, se basado en el progressive house típico de la corriente EDM, pero en vez de hacerlo a 128 Bpm’s, lo ha reducido a 90.
Y si todavía no lo ves claro, échale un ojo al remix de Dash Berlin a la canción de Walker, el cual parece que no estaba muy de acuerdo con esto de reducir velocidad y ha decidido hacer su versión 128 (Si…No es que se haya matado mucho haciendo el remix, pero funcional es).
5. Crea un tema con una sola librería
Algo bueno que tenían los productores de hace 30 años era la falta de recursos, y si, en ocasiones eso es bueno, ya que con pocos recursos te exprimes los sesos para conseguir el máximo partido.
Hoy día, el tener al alcance de la mano tanto material para hacer música, es un avance, pero a veces un gran problema, ya que si no sabemos ponernos límites de tiempo a la hora de navegar por nuestras librerías de sonidos habremos perdido una tarde entera sin haber hecho nada.
No esperes que encontrar ese sonido perfecto que necesitas en cierto momento, por que no llegará, la gracia está en que lo crees tu, ya sea desde cero o modificando al máximo un sonido existente con efectos y demás herramientas.
6. Mezcla dos o más géneros
¿Fácil de entender no?
La gran mayoría de géneros nuevos que aparecen no son más que fusiones.
Ej:
- Groove, tempo y percusión Tech House + Vocal y progresión armónica comercial = Estructura común del Future House
Solamente tienes que pararte a escuchar el eslogan del Podcast de Oliver Heldens “Taking the underground to the mainstage”.
Y tira millas
Estoy seguro que rompiendo tu rutina con alguno de estos experimentos conseguirás resultados diferentes a los comunes.
¿Tienes algún truco para conseguir producciones frescas y originales? Compártelo en los comentarios 🙂
¡Únete a la mejor comunidad para productores de música electrónica, conocimiento, recursos y muy rollo! Si quieres seguir al día con nuestro contenido síguenos en Facebook, Twitter e Instagram.