¡Muy buenas, producers! Hoy queremos dedicar esta entrada a explicar un poco qué es un compresor de audio y cómo funciona esta herramienta fundamental para lograr un sonido profesional en nuestras producciones.
Seguramente muchos de vosotros sepáis qué son los compresores e incluso los utilicéis habitualmente en vuestras sesiones de estudio. Sin embargo, nos hemos dado cuenta de que muchos productores, sobre todo los que están empezando, no tienen del todo claro qué le ocurre exactamente al sonido cuando aplicamos compresión de audio.
Por ello, hemos decidido dedicar esta entrada a contaros de qué va esto de la compresión y por qué es tan importante utilizar compresores para controlar la dinámica de audio de nuestros temas.
¿Qué es un compresor de audio?
Un compresor es una herramienta que se utiliza para reducir el rango dinámico de una señal de audio. Se entiende por “rango dinámico” a la diferencia de decibelios que hay entre el pico más alto y el más bajo de la señal. Por tanto, los compresores nos van a servir para reducir esa diferencia, “acercar” esos picos de la señal entre sí y conseguir un sonido mucho más coherente.
Te dejamos por aquí una clase gratuita de nuestro curso básico de Ableton Live en la que nuestro profe Álex González te explica en detalle las bases de la compresión y la dinámica de audio:
Parámetros de un compresor
Todos los compresores cuentan con una serie de parámetros que, en función de cómo los ajustemos, nos darán como resultado un tipo de compresión u otra. La mayoría de los compresores nativos de otros DAW y de terceros suelen los mismos parámetros o parámetros similares, aunque puede variar el nombre de algunos de ellos.
En el compresor de Ableton Live, estos parámetros son los siguientes:
- Threshold o umbral: el nivel a partir del cual empieza a actuar el compresor.
- Attack: el tiempo que tarda el compresor en actuar después de saltar el treshhold
- Ratio: la cantidad de compresión que se aplica a la señal cuando pasa el nivel del threshold.
- Release: el tiempo que tarda el compresor en dejar de comprimir (es importante que este valor vaya en consonancia con el Attack, pues de lo contrario el compresor no tendrá tiempo de reiniciarse antes de volver a comprimir el siguiente pico).
- Output o Make up (nivel de salida): con este parámetro podemos aumentar la ganancia de la señal de salida para compensar los dB que se pierden al comprimir.
- Knee o codo: esta función sirve para modificar el comportamiento del compresor para que actúe de manera agresiva (hard knee) o progresiva (soft knee).
- Look ahead: nos permite configurar el compresor de forma que se anticipe unos milisegundos al momento del Attack para que la compresión sea más rápida y precisa.
Por tanto, un compresor se encarga de reducir la cantidad de señal de audio cuando esta supera un cierto umbral. La forma en que reduce esta señal dependerá de qué valores les demos a los parámetros anteriores.
¿Cómo afecta un compresor sobre el audio?
Para usar el compresor de audio correctamente, es importante desarrollar un buen criterio a la hora de decidir si debemos comprimir o no una señal de audio determinada. Lo primero que debemos hacer es fijarnos en el rango dinámico de la señal. Si el rango dinámico es amplio, la señal necesitará compresión.
Por poner un ejemplo, las percusiones, vocales o arpegios, generan rangos dinámicos bastante amplios, así que es habitual aplicar compresión en elementos en los que necesitemos tener un nivel más estable del rango dinámico.
Ojo, a veces, nos interesará que una pista tenga mucho rango dinámico y por lo cual no haga falta comprimir. De hecho, comprimir por defecto es uno de los principales errores de principiante, ya que no siempre es realmente necesario para hacer una buena mezcla.
Para que te hagas una idea de a qué nos referimos, en la siguiente imagen puedes ver la diferencia entre una señal de congas sin comprimir (en azul) y la misma señal después de haberle aplicado un compresor (en rosa):
Como ves, la diferencia se puede apreciar a simple vista en la forma de onda de cada señal: al comprimir, eliminamos los picos altos y logramos un rango dinámico más reducido.
Todo esto lo vemos en detalle dentro de nuestro curso de compresión y dinámica de audio con nuestro profe Veko Swan. Te recomendamos que le eches un vistazo si quieres aprender sobre dinámica, compresores, técnicas de compresión, limitadores y mucho más.
¿Cuándo debemos usar la compresión de audio?
En el punto anterior hemos visto cómo afecta la compresón sobre el audio. Veamos ahora algunos ejemplos de casos que pueden requerir un compresor.
Una de las situaciones en las que más suele utilizarse la compresión es en esos picos de energía que hacen que perdamos headroom. Estos picos de energía pueden necesitar comprimirse no solo en percusiones, sino también en bajos en los que abrimos el cutoff o en las notas más agudas de un arpegio, por ejemplo. Lo que ocurre con estos picos es que nos pueden impedir sonar más alto al final de la mezcla, y es precisamente aquí donde nos puede ayudar aplicar compresión de audio.
Otro caso en el que podemos utilizar un compresor es cuando, a nivel creativo, queremos lograr una mayor pegada jugando con el Attack. En este sentido, el compresor puede utilizarse también como una herramienta de diseño de sonido, por ejemplo, para lograr bombos más potentes con una buena patada.
En lo que respecta a las voces, aplicar compresión nos puede servir para estabilizar la señal y aplacar los cambios de intensidad inherentes a la voz del cantante. Aquí, de nuevo, dependerá de cada caso particular, pues puede ser que precisamente lo que buscamos es un rango dinámico amplio, como puede ser lo que ocurre en la ópera o la música clásica.
Otros usos: compresión con Sidechain
La compresión con Sidechain es una manera de comprimir una pista de audio en función de la señal que le entre desde otra pista de nuestro proyecto. Esto se utiliza, principalmente, para dejar espacio entre aquellas pistas que ocupan el mismo lugar en el espectro frecuencial, como pueden ser el bombo y el bajo.
Estas dos pistas ocupan las frecuencias graves del espectro (las más problemáticas en términos de mezcla), así que es necesario comprimirlas con Sidechain para que cada sonido tenga su espacio y no choquen las frecuencias.
Lo que hay que hacer en estos casos es activar el Sidechain en el compresor del bajo y seleccionar como pista de entrada el bombo. De esta forma, le indicamos al compresor que reduzca la señal de nuestro bajo cada vez que suene el bombo, para así poder percibir bien el sonido de este último.
¿Por qué es importante la compresión para la producción musical?
La compresión de audio es algo que todo productor de música debe conocer. Si no dominamos bien el funcionamiento del compresor, difícilmente lograremos una buena dinámica de audio en nuestros temas, y acabaremos utilizando los compresores sin saber bien para qué.
Si, por el contrario, aprendemos a utilizar estas herramientas y conseguimos sacarles el máximo partido, mejorará la dinámica de audio de nuestras producciones y, con ello, también su calidad.
¿Quieres aprender a usar el compresor y otros procesadores de dinámica para lograr el mejor sonido? En Producción Online tenemos diferentes cursos de producción musical online, así como de mezcla y mastering en los que aprenderás todo lo que necesitas para desarrollar tus proyectos de principio a fin. Todos nuestros cursos son 100% online (para que los sigas a tu ritmo) y están adaptados a los niveles básico, intermedio y avanzado.
Hazte Miembro PRO y accede a las más de 1007 lecciones en vídeo que tenemos en nuestra plataforma.
¡Te esperamos en la Academia!