Qué hacer cuando tu creatividad se estanca o estás desmotivado

Vamos a ser sinceros.

Esto es algo que le pasa con más o menos frecuencia al 100% de los productores de música, sean del género que sean y sean quienes sean. Abres tu DAW y por falta de creatividad no acabas sacando nada provecho, pasas horas y horas y el resultado obtenido no vale ni para mantenerlo en ordenador guardado el proyecto de éste. Es frustrante y una sensación algo molesta… como de impotencia, llevándote a tener un día poco productivo (en lo que a la música se refiere) y lo que es peor, desmotivándote a seguir en ello.

Pero… ¿Podemos usar algunas pautas que nos ayuden conseguir ese flujo de ideas que buscamos en un momento dado? Vamos a comentar algunas.

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1. Tómate un respiro

Esto puede llegar a ser difícil de controlar, tanto para que llegue a ser un hábito inexistente, como para que se convierta en un hábito… muy hábito. Por lo general, los productores que luchamos para que algún día esto llegue a ser un empleo al 100×100 para nosotros nos obcecamos en invertir horas y horas, pensando que cuando nosotros no estamos trabajando otro no habrá parado y estará cogiéndonos la ventaja, es bien cierto pero… Hay debemos darnos margen para poder cuidar nuestra salud mental. Sobretodo si estamos trabajando para nosotros mismos, y no para otro.

Tomarse un respiro de varios días alejado de la música (en su proceso creativo) puede ayudar a despejarnos y volver con las ideas más claras.

2. Haz colaboraciones

Esto es un trabajo que como en la mayoría de cosas, la unión hace la fuerza. Normalmente acostumbramos a aprender por nuestra cuenta, con práctica y de manera autodidacta, eso significa que, cuando nos juntamos con otra persona del sector para realizar un proyecto juntos es muy probable que nos quedemos impresionados de lo que podemos aprender de ellos. Maneras de trabajar, maneras de inspirarse, conocimientos… cada persona somos un mundo, y cada vez que compartimos conocimientos expandimos nuestra mente a un plano más allá de donde suele habitar.

3. Alimenta tu mente

Hártate a leer, estudia y aprende. Es normal ser a veces reacio a mirarse largos video tutoriales, o leer artículos donde se explique algo que te pueda interesar. Con la práctica y el “error-acierto” se aprende, pero pudiendo aprender directamente de gente que ya ha pasado por lo mismo que nosotros…¿Por qué no hacerlo? Es increíble el contenido de valor que podemos llegar a encontrar en la red (y en libros y revistas físicas), además, de manera gratuita en la mayoría de los casos. Solo debemos invertir un poco de nuestra jornada en ello, una vez tengas la costumbre (si no la tienes ya), verás que a la larga tus conocimientos crecerán exponencialmente abriendo veda a tu creatividad.

4. Ponte metas

Cuando decides ser productor musical, estás diciendo entre paréntesis que vas a ser emprendedor, y no es fácil, para nada, sobretodo cuando no tenemos una guía de por donde tiraremos profesionalmente. Me explico. Aquí nadie nos va a decir el cómo y el que debemos hacer, por más que nos empeñemos en buscarlo yendo a clases magistrales y dando por saco al conocido de turno para preguntarle acerca de la clave del éxito. Que no digo que esté mal aprender de los demás, siempre y cuando hagas un uso responsable e inteligente de sus experiencias y consejos.

Así pues, toma el valor para plantearte tus propios objetivos. Cuando te iniciar algunos objetivos útiles son por ejemplo… (Aprender como funciona la estructura de un tema del género que queremos producir, o, trastear y aprender acerca del DAW que estamos usando, entender que es esto del tempo y por que y cómo debemos tener todo a la misma velocidad). Con calma, más adelante podremos seguir marcando objetivos añadiendo una fecha a estos.

Así es y así funcionamos.

Cuando te sientas desmotivado o bloqueado ya sabes, esto es solamente parte del proceso y es completamente normal. Lo importante no es que te ocurra o no, lo importante es como reaccionas ante ello, así que aquí has podido leer varias ideas para poder ocuparte cuando te sientas improductivo.

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