Uno de los principales problemas que tenemos a la hora de trabajar en un estudio con poco o sin acondicionamiento acústico es que no conseguimos que nuestros temas suenen igual de bien en “la calle” que dentro de él.
Problemas como exceso o falta de graves, falta de brillo, pegadas que desaparecen son los típicos que nos encontramos cuando comparamos nuestros temas en otros sistemas de audio fuera de nuestro estudio.
Y bien, ¿Cómo solucionamos esto?, me gasto el sueldo de este mes y el del siguiente en otros altavoces? No sería buena idea sin antes pasar por estos 3 pasos.
Colocación de la mesa de trabajo
Evita trabajar en esquinas, por que hará que percibas un nivel de graves superior al que realmente tienes, intenta centrar tu mesa entre pared y pared, de esta forma conseguirás una mayor igualdad de feedbacks de tu sala, es decir, tanto reflexiones como cancelaciones. Bien, ahora todos nuestros enemigos acústicos nos llegan por igual, procedamos a evitarlos.
Haz un triángulo equilátero con tus monitores
Lo recomendado en la colocación de tus monitores de estudio es que estén en la misma distancia entre ellos que la que tienen respecto a tu punto de escucha, es decir, formando un triángulo equilátero.
El siguiente paso será asegurarse que tenemos los conos de nuestros monitores a la altura de nuestros oídos y estén bien enfocados hacia nosotros, de esta forma nos aseguraremos tener una óptima imagen estéreo de estos, llamado como Sweet Spot.
Coloca tratamiento acústico
Merece la pena invertir un poco en estos materiales ya que nos brindará un sonido más fiel en nuestra sala. Coloca absorbentes en las paredes laterales, a la altura de tu cabeza, para poder evitar las reflexiones primarias (Primeras Reflexiones).
Una vez tratados las altas y medias frecuencias con los absorbentes no hay que olvidarse de los graves. Cubre aquellas esquinas que suelen estar detrás de tus monitores con las denominadas trampas de graves, nos hará tener un feedback de graves más fiel al que nos está emitiendo el monitor.
Está claro que invertir más dinero en tu equipo de escucha hará que mejores el sonido de tu sala, pero antes no te olvides seguir estos pasos, ya que el tratamiento acústico y la ubicación de tu punto de escucha tienen un gran impacto en el sonido que nosotros percibimos.